Efectos nocivos de la tecnología en la salud

 El tecnoestrés se relaciona con el uso de la tecnología, y es considerado como una experiencia psicosocial negativa, la cual conlleva a una activación psicofisiológica no placentera, que a la larga desencadena efectos a la salud de los trabajadores. 

Es necesario recalcar que la tecnología por sí sola no desencadena estrés y/o efectos a la salud de los usuarios, sino una serie de factores del entorno laboral como el tipo de exposición y características del trabajo que predisponen a los trabajadores a los efectos psicofisiológicos anteriormente mencionados, según Salanova, Grau, Llorens y Schaufeli (2001) al estudiar el tecnoestrés es importante definir los grupos ocupacionales de acuerdo al uso que se le da a la tecnología en las actividades laborales cotidianas, ello con la finalidad de conocer de manera diferencial el tipo de exposición a las TIC´s, ya que de esto dependerán los efectos de estas, por ejemplo existen puestos que implican el uso de redes integrales de trabajo y cuya actividad laboral comprende el manejo de sistemas operativos de gestión organizacional, como por ejemplo las SAP (Systems, Applications, Products in Data Processin) por sus siglas en inglés, el internet y los procesadores de datos y texto, en los que podemos ubicar a los sujetos de interés para la presente investigación; y puestos de uso avanzado de TIC´s como son los diseñadores de sistemas informáticos y encargados de control numérico asistido por los ordenadores, los cuales no forman parte del presente estudio. En relación a ello, es importante mencionar que, la transformación de los procesos tecnológicos no solo ha propiciado un avance importante en la producción de bienes y servicios en beneficio de la humanidad, ello ha implicado nuevas formas de organización en el ámbito laboral, con exigencias para los trabajadores que muchas de las ocasiones no cuentan con la formación o son incapaces de asumir de manera adecuada estas nuevos modos de trabajo, debido a la magnitud de los cambios, éstos también han impactado en la aparición de efectos nocivos en la salud tanto física como mental de los trabajadores, el exceso en la utilización de estas tecnologías han propiciado nuevas 46 PIENSO en Latinoamérica Año 3 Núm. 7 enero - marzo 2020 patologías, las cuales se manifiesta en desgaste, fatiga y estrés. Por lo que se refiere al estrés, existen una variedad de factores que lo generan, pero el que nos trae a desarrollar el presente, es el estrés propiciado a través del trabajo; para el Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH por sus siglas en ingles), el estrés laboral puede definirse como “las respuestas físicas y emocionales dañinas que ocurren cuando los requisitos del trabajo no coinciden con las capacidades, recursos o necesidades del trabajador. 

El estrés laboral puede conducir a problemas de salud e incluso lesiones” (NIOSH, 1999). Ante la situación cambiante de las condiciones de trabajo y el uso de las tecnologías, hay trabajadores que se adaptan bien, sin embargo, como lo refiere Aragüez (2017), “en la mayoría de los casos, los trabajadores tienen una mala adaptación al uso de estas -bien sea por defecto o bien por exceso-, dando lugar a situaciones estresantes en su puesto de trabajo”. Los trabajadores muchas veces se ven obligados a adaptarse al uso del correo electrónico como principal medio de comunicación, a la firma electrónica como control laboral, al tratamiento automatizado de datos en programas de cómputo para los cuales no reciben capacitación previa y al uso adictivo de la Internet, entre otros. Una respuesta a la implementación de tecnologías de la información y comunicación (TIC´s) como lo son internet, telefonía móvil, correo electrónico, ordenadores de escritorio- portátiles, nube, redes sociales y actualmente el teletrabajo, y sus posibles efectos perjudiciales para los trabajadores, es el tecnoestrés, que según Llorens, Salanova y Ventura (2011) es un tipo de estrés especifico causado por el uso de las tecnologías, el cual es promovido por la falta de capacidad de adaptación por parte del trabajador, convirtiéndolo en una experiencia psicosocial negativa, que lleva a un nivel de activación psicofisiológica no placentera y al desarrollo de actitudes de rechazo hacia dichos recursos.

 El tecnoestrés es un tipo de estrés provocado por la exposición continua a las nuevas tecnologías, tanto dentro como fuera del ámbito laboral, es un riesgo emergente y actual en las organizaciones que se encuentra ligado a los efectos psicosociales negativos que se generan a raíz del uso constante y excesivo de las nuevas tecnologías, que puede producir ansiedad, temor al uso y dependencia al uso de éstas, generando con ello una serie de patologías, entre las que se encuentra el estrés. El tecnoestrés está ligado “a efectos psicosociales negativos generados por el uso desmesurado, contante y mantenido de las nuevas tecnologías en el trabajo, a los insuficientes tiempos de descanso durante la jornada laboral, que impiden desconectarse de los equipos de trabajo, y al uso cada vez mas cotidiano de las nuevas tecnologías en el ámbito laboral, doméstico y social”. Dentro de las consecuencias físicas y psicológicas que los trabajadores pueden llegar a presentar a raíz del tecnoestrés se encuentra la depresión, dificultades de concentración, pérdida de memoria, consumo de sustancias, problemas musculares, problemas para conciliar el sueño, dolores de cabeza, trastornos gastrointestinales, sensación de agobio, fatiga crónica; lo cual a la larga lleva a bajas laborales, absentismo, bajo rendimiento y baja productividad laboral.